Fuente: El Tipógrafo online – Por: Norelis Vilchez – 10.01.2021
– La cantante Rita Góngora y la vedette argentina Beatriz Alegret, lo señalan como una persona “muy perversa”.
Dos exparejas de Buddy Richard denunciaron haber sufrido fuertes agresiones por parte del cantante en la década de los 70 y 80.
Estas acusaciones pusieron en la palestra el lado más oscuro del artista que forma parte de la identidad musical del país.
Las acusaciones hechas por la cantante Rita Góngora y la vedette argentina Beatriz Alegret fueron realizadas en un reportaje de Radio Biobio, con motivo de un homenaje que se le realizaría a Richard en la comuna de Graneros, lugar donde reside.
En el reportaje, Góngora relató escenas macabras de violencia por parte del compositor mientras criaba a las tres hijas que tienen en conjunto.
«Él es cazador también, le gusta la caza, y me perseguía con escopeta (…) Me persiguió dos veces disparando al aire, felizmente. ¿Sabes lo que es eso? Yo corriendo por la parcela, y él disparando al aire. En otra oportunidad, él sacó un cuchillo y yo me fui al columpio de las niñitas, y ahí trataba de amedrentarme con el cuchillo. Es una persona muy perversa», relató Góngora.
«Tengo una audición que no es 100%, a causa de estos golpes. Tengo una cicatriz en mi párpado izquierdo, pero lo que más me duelen son las cicatrices del alma. Esas no se borran, es imposible», agregó la mujer que el año 1986 decidió dejar su hogar tras años de maltratos físicos y psicológicos.
A estas denuncias se sumó además la vedette y comediante Beatriz Alegret, quien tuvo una breve relación con Ricardo Toro, el verdadero nombre del cantante, en los años 80.
«Era como un secuestro en el país. Estar al lado de Buddy Richard es estar al lado de un golpeador, maltratador», cuenta Alegret en el reportaje.
Tras los maltratos, Alegret aprovechó un viaje del cantante para escapar a Argentina y volver recién tres años después a nuestro país. «Después de 3 años me atreví a venir, después de muchos exámenes psicológicos, de psiquiatras, de muchas terapias. Me liberé, por eso nunca más hablé mal de él. Los médicos hicieron mucho por mí».
La razón de las mujeres para entregar sus testimonios, fue el homenaje que el municipio de Graneros pretendía hacer al artista al nombrar una calle con su nombre.
«Espero haber sido un buen ciudadano. Ya tenía, en administraciones anteriores, el título de hijo ilustre, lo cual respeto y quiero mucho. Hay que actuar como hijo ilustre», decía Richard en diciembre pasado tras enterarse de este reconocimiento.
Tras las denuncias, la municipalidad decidió paralizar el homenaje al cantante. «Nos hace mantener ahora en congelamiento el proyecto para evaluar la situación y se puedan aclarar los hechos que afectan a mujeres», dijo el alcalde Claudio Segovia. Desde el Servicio Nacional de la Mujer y Equidad de Género (Sernameg) indicaron que nunca es tarde para denunciar un hecho de violencia contra la mujer.
«Desde Sernameg hemos contactado a ambas mujeres para ofrecerles el apoyo psicosocial que ellas puedan requerir», dijo Johanna Olivares, directora nacional (s) del Sernameg.
Fotografía: El Tipógrafo
