Lunes, 29, Abr, 2:41 PM

Fuente: El Rancagüino online – 14.04.2024
Por su parte Emerson Avendaño señaló que la comunidad debe pensar bien a quien elegirá en octubre como sus autoridades. “Sepan quienes han dañado el municipio de Rancagua y nunca más sean elegidos como autoridades”.

Al día posterior del dictamen del Juzgado de Garantía y Tribunal Penal Oral de Rancagua, de dictarle prisión preventiva al alcalde Juan Ramón Godoy por presuntos hechos de corrupción y a otros cuatro empresarios, recibirnos en el estudio de El Rancagüino TV a los concejales Hugo Guzmán Millán y Emerson Avendaño, quienes expresaron sentirse satisfechos por “el deber cumplido”.
Cuando se les consultó sobre el abrazo que escenificaron junto a las concejalas Valentina Cáceres y María del Carmen Orueta, dentro del tribunal, Hugo Guzmán aclaró que, “no se trata de una celebración en el sentido de que haya que festejar esto, sino que más bien fue un abrazo fraterno, de satisfacción por el deber cumplido”.
Guzmán Millán, indicó además que, se mantuvieron firmes en su postura y en solicitar las medidas preventivas máximas, por creer que eso era lo correcto para la ciudad, y sobre todo para la administración del municipio y de sus corporaciones, que tocan temas tan sensibles como la educación y la salud.
“Satisfechos con la decisión del tribunal de poder requerir y aceptar la prisión preventiva”, recalcó el concejal Guzmán Millán.
Por su parte, Emerson Avendaño, aclaró que el abrazo se trató de “un desahogo y alivio” luego de un proceso que ha durado más de dos años, recibiendo juicios de valor y atentados, haya terminado.
“Ahora está por el camino de la justicia y esperamos que así se haga para que el municipio de Rancagua y la comunidad vuelva a creer en esta institución que administra la ciudad”, exteriorizó Avendaño.
Ambos concejales dijeron mostrarse confiados, de que, al inicio de la formalización, ya de forma inmediata sabían que iba a existir una cautelar dura que iba a inhabilitar a Juan Ramón Godoy, por lo tanto, nunca tuvieron dudas de que se iba a hacer justicia en ese sentido, por lo que reiteraron que se echó por tierra, la teoría de que se trataba de un ataque político.
Sobre lo que pasará de ahora en adelante, Hugo Guzmán aclaró que, protocolarmente, la concejala Valentina Cáceres asume la Alcaldía para representar al municipio en cualquier evento o actividad; mientras que el Administrador Municipal, asume como Alcalde subrogante, para lo administrativo y en los próximos días, entre los 10 concejales elegir a uno que pueda llegar al fin del periodo.
Sobre la posición que asumieron el resto de los concejales, de mantenerse al margen de las denuncias de presuntos hechos de corrupción que estarían cometiéndose dentro de la municipalidad de Rancagua, Guzmán fue enfático al señalar que “ellos tomaron la decisión y la opción de no sumarse a este rol fiscalizador que nosotros ejercemos de manera fuerte y seria”.
Consultados sobre sus aspiraciones de tomar las riendas del municipio una vez que el Concejo Municipal tome la decisión de un nuevo alcalde, Hugo Guzmán, aclaró que “yo creo que es legítimo que cada uno de nosotros pueda tener esa intención, pero hay que evaluarlo, conversarlo, pensarlo muy bien, porque se trata de tomar un municipio que está (…) con serios problemas, por lo tanto, es un fierro caliente”. En el caso de ser electo como alcalde por sus pares del concejo, Guzmán señaló que renunciaría a la opción de ser candidato a alcalde o a concejal en octubre. “Dedicarme al 100% hasta el 6 de diciembre a una labor, administrar el municipio y mantener este buque a flote, no puedo mezclar ser candidato y ser paralelamente alcalde, creo que no corresponde”.
Emerson Avendaño, ante este planteamiento señaló que “Yo por lo menos aspiraciones a elecciones de alcalde no tengo, lo dije el día de ayer, y por respeto a mis colegas y al Consejo Municipal, tampoco creo que esté el espacio para poder determinar posiciones frente a la emergencia que estamos viviendo”.
Además, señaló que es necesario que el concejo municipal se unifique “como institución debemos dar garantías a la comunidad de que se sigue trabajando, que el bien común está en democracia, y que el municipio de Rancagua debe funcionar (…) espero que esto (la elección del alcalde) no sea una pelea o una discusión, sino que salga humo blanco inmediato”.

Fotografías: El Rancagüino