
Fuente: www.pichilemunews.cl – 29.07.2023
– La seleccionada nacional actualmente desempeñándose en Universidad Católica, club al que ayudó a formar de cero, la jugadora de 24 años está haciendo historia en el deporte de la ovalada nacional.
– “Quiero mostrar a la juventud Rapanui que puedes lograr lo que te propongas”, dijo.
Cercana al rugby desde pequeña, Maite Hagarahi Nahoe Chaura (24) tomó una decisión radical hace un año. Estaba de paso por Chile continental cuando se dio cuenta que dedicarse a este deporte de manera formal era más que un deseo, sino que una opción real.
Es así como, junto a otras tres jugadoras, empezó a realizar la gestiones para conformar lo que hoy se conoce como el club Universidad Católica, equipo que compite en las ligas locales de Santiago y en torneos nacionales de un incipiente rugby femenino.
El último año ha visto a Maite Nahoe convertirse en uno de los emblemas del equipo, habiendo ganado el trofeo a la mejor jugadora de torneos como el Campeonato Mamut 2022 y el Torneo Zona Centro 2023, lo que le abrió las puertas de par en par a la preselección chilena que está concentrándose de cara a los Juegos Panamericanos.
HACIENDO HISTORIA EN EL RUGBY NACIONAL
Con su paso por el combinado, Maite Nahoe se convirtió en la primera jugadora proveniente de Isla de Pascua en formar parte de la selección, un hito que la deportista toma como honor, pero también como una responsabilidad de cara a sus coterráneos.
En ese sentido, la jugadora comentó que “lo que más me motiva es mostrarle a la juventud Rapa Nui que puedes lograr lo que te propongas. A mi familia le dije que me iría al continente y que llegaría a la selección, y ya estoy en miras de conseguirlo. Eso me motiva a seguir esforzándome”.
Un año después de iniciar su aventura, Maite Nahoe cree que el rugby femenino está creciendo, afirmando que “se han ido incorporando jugadoras. Ahora somos casi 20 en el equipo de la UC, con un plantel A y un grupo de desarrollo. Como me integré recientemente a los procesos de la selección, no estoy segura si este crecimiento ha repercutido ahí”.
Por último, la atleta recordó lo complejo que fueron sus primeros meses, adaptándose no sólo a una nueva vida, sino que incluso a un nuevo clima. “En un principio fue muy difícil.
San Carlos de Apoquindo es mucho más frío que la isla, pero obstáculos como ese me sirvieron para fortalecer el espíritu, la perseverancia y todos los valores del rugby”, cerró.
Fotografías: Santiago2023
