
Fuente: www.pichilemunews.cl – 16.03.2021
No una, sino varias familias viven hoy -y las últimas semanas- sumidos en la tristeza y el dolor tras la partida del ser querido. Una partida que nos llegará a todos, pero que cada familia espera sea más tarde, no inesperada; pese a la amenaza global que el Covid 19 tiene al mundo -más que una guerra- en jaque.
No obstante a que cada día fallecen personas, vecinos y familiares, por causas no solo del Covid19, vemos que pese a todas las medidas sanitarias que se recomiendan, la indolencia e irresponsabilidad se enseñorea, soslayándose las recomendaciones vulnerando la seguridad que, respetada, da una mayor probabilidad de salir más rápidamente de la pandemia.
Estos momentos de dolor y tristeza que viven tantos y que también nos alcanzan, en tiempos normales se superan mejor con acompañamiento, con palabras de aliento y solidaridad ante el infortunio, con un abrazo, un apretón de manos. Mas, hoy aunque sea ese el imperativo, tenemos que ser más fuerte aún -y así lo comprenderán los deudos más directos- para entender la ausencia de muchos que, en otras circunstancias sin duda estarían ahí, como en otras ocasiones donde la familia se reúne, muchas veces, después de años.
Aunque en este caso -la muerte del pichilemino y nuestro primo Oscar González Becerra- no fue a causa del Covid19, no por ello se deben olvidar otras recomendaciones sanitarias, tales como aforo, distanciamientos necesarios, entre otras.
En las últimas horas y ya no golpeados con la noticia, tras escribir sobre la muerte de Oscar, Nancho o Poronguito, hemos visto cómo a través de diversos mensajes en las redes sociales, la comunidad ha expresado no solo su pesar, sino el reconocimiento al talento que tantas veces mostró Oscar González hijo, y que con 68 años, seguía pleno y dispuesto a seguir haciéndolo. Ya en la Iglesia, en reuniones familiares, con amigos; como también -en el pasado- en sus años juveniles en presentaciones integrando grupos electrónicos, o de folclore junto a sus hermanos, y con ellos no hace mucho, rememorando al Grupo Pukará.
Sin duda no solo le recordará por siempre su familia, sus amigos, su entorno, sino toda la comunidad que le recordará por las diferentes facetas que desarrolló, ya atendiendo su Minimarket en su querido barrio El Llano hasta hace muy poco. Y luego, en otro lugar, pero siempre con la amabilidad hacia sus clientes y vecindad. Y, por cierto, en el circulo artístico local que lo tuvo como un gran guitarrista, bolerista y folclorista. Y desde que se creara la Agrupación Cultural de Folcloristas como uno de los suyos.
Todos, unos y otros, aunque no todos en forma presencial, están hoy a esta hora -como desde ayer en su Velatorio- desde las 15 horas dándole una despedida a Oscar, a Nancho, al Poronguito, de sus restos mortales en el Camposanto; mas desde que expiró en un mejor y eterno lugar junto a los seres queridos que le esperan -sus padres, abuelos, tios (as).
Primo, que descanses en Paz. Y a Prosperina e hijos, primos, tengan la fortaleza y tranquilidad para seguir adelante con el consuelo que el ser querido seguirá vivo en ustedes y que su recuerdo perdurará entre nosotros.
Fotografías Collage: Archivos “pichilemunews”/Facebook OGB/Internet
